La palabra y el palabre-lio

A pedido de luciérnagas, vaquitas de San Antonio y libélulas la primavera da pie a la escritura de aquellos que entienden que el tiempo no es mas que un disparate de colores y onomatopeyas que se van hilando por la tejedora del destino y nace una palabra, ésta puede ser atendida de muchas maneras, pero costo tanto el nacimiento que "fue todo un parto", cuando en verdad no creen que hubiese sido mejor tirarla al río y que se la llevaran lo peces juguetones, que las ondinas y nereidas la llenaran de su magia y al llegar hacia esa cara humana los duendes de su corazón la recibieran afectuosamente con un -pase señora palabra. Y la palabra sorprendida de ni siquiera haber tocado la puerta, alargue el suspiro de viento y diga- gracias. Comunicación bastante explicita para darle una explicación o un larva mental. Nos hemos separado de aquel país de las maravillas, tanto pensar en príncipes y principesas, en sapos y conjuros mágicos para hacer que aquello que somos, con un poquito de azúcar, flores y muchos colores, se convierta en una imagen tamizada, confusa, llena de pozos ciegos e incertidumbres compradas al todo x2 pesos. El peor enemigo de uno mismo es uno mismo, desactivamos las antenitas de las señales, le cortamos el pelo a la casualidad y por ultimo,y esto lo digo con desagrado, le terminamos por poner candados al dueño de nuestra vida, el corazón, poniéndole nombre a cosas que nunca lo tuvieron, porque así se nos ha criado, y así lo hemos adquirido, como animas caminando por un mundo hipocratizado. La palabra se siente asustada tanto razonamiento deportivo de como debe salir de la boca, esta cansada de ser cambiada de acuerdo al contexto, texto, pretexto?. la palabra ahora juega a las escondida con la verdad, entre risas y cachetes colorado, ha armado su campamento en la cuidad del olvido, porque ya no tiene valor para decirle basta a los complejos y las vacunas anti-espontaneidad. Señores, señoras, señoritos, señoriñas y gente en general, liberemos a la palabra, dejemos que surja como le encante a ella, y que los sentidos la acompañen orgullosos de sentir libremente, que desde ahora en la cuidad del olvido ya no viva nadie y dejemos que un [te quiero] salga distraído y llene de burbujas a la cara humana, les aseguro que no hay hecho mas bonito que ver convertido a un humano en zurrón de pastor.